miércoles, 8 de abril de 2015

No compre suavizantes de ropa nunca más – Son dañinos! Hágase usted mismo su suavizante con ingredientes naturales...!!!

A todos nos gusta que la ropa huela bien, pero ¿sabía que a los suavizantes para la ropa les añaden fragancias perjudiciales? Estas fragancias son especialmente peligrosas para los niños.

Los expertos dicen que los suavizantes comerciales causan alergias, y teniendo en cuenta su alto contenido de productos químicos, no deben ser muy buenos para la salud. Un antiguo refrán dice: “Si no se lo puede poner en la boca, no se lo ponga en la piel, con esto, es posible que la próxima vez que vaya a comprar un suavizante para la ropa, se lo piense dos veces. Los suavizantes para la ropa penetran en el cuerpo a través de la piel y causan graves daños.
Por lo tanto, evite el uso de suavizantes químicos para lavar la ropa, especialmente la ropa de los niños.
Para obtener aroma se añaden ftalatos y los estudios han demostrado que perjudican el equilibrio hormonal en los animales. Por lo tanto usando estos suavizantes para la ropa, no solo está dañando su salud, sino también el medio ambiente.
Si todo esto le ha convencido para no comprar los suavizantes comerciales, puede confiar en la naturaleza para fabricarse un suavizante natural. Solo necesita unos ingredientes baratos y fáciles de encontrar como son el bicarbonato de sodio, agua, aceite esencial, y el vinagre de sidra de manzana.

Ingredientes:
-10 g de bicarbonato de sodio.
– De 150 a 200 ml de agua caliente.
– 800 ml de vinagre de sidra de manzana.
– 20 gotas de aceite esencial, no todos los aceites esenciales son aptos para entrar en contacto con la piel, hable con su herboristeria de confianza. Mis favoritos son el de lavanda, naranja dulce y limon.

Modo de preparación:
Es necesario un recipiente de plástico grande (de 3 a 5l), debido a la reacción de las burbujas. Mezcle el agua, el bicarbonato de sodio y el vinagre de sidra de manzana. Los ingredientes producirán una reacción química creando un montón de burbujas.
Una vez que el líquido “se asienta”,  viértalo en un frasco. Agregue el aceite esencial a su elección y agítelo bien.
Consejo extra:
Agite el suavizante antes de cada uso. Cuatro cucharadas de suavizante casero son suficientes para cada carga de lavadora.

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